Escribo este post desde el móvil, sentada al lado de la cama de mi hija, en el suelo, con una sola mano. La otra me la tiene agarrada ella, como si fuese suya, como si toda yo entera fuese suya.
Estamos experimentando una fase de apego como nunca antes. Os lo digo de verdad, nunca jamás mi hija había demandado TANTO de mí.
Ella siempre ha sido de carácter fuerte e independiente. La niña precoz, la que aprendió a caminar sola con 10 meses y nunca más me agarró la mano sin protestar antes.
La que desde que aprendió a comer con cubiertos, al año y pico, no deja que nadie toque su comida. Ella es la niña del «yo solita» del «así no mamá, es así, deja que ya lo hago yo» la que elige su ropa casi a diario, con dos años y poco.
Ella tan terca, intrépida, autónoma…
Quizás por eso me ha pillado desprevenida, la he visto crecer a pasos agigantados y me he olvidado de que solo tiene 2 años y medio.
Hace aproximadamente 10 días que hemos tenido una especie de regresión,ya no quiere comer sola, ya no quiere ir al baño sola, ya no quiere dormir sola.
Las frases que más repite son:
Mami me ayudas. Mami donde vas. Quiero colo.
Mami es mía. Tú no, quiero a mamá. No quiero ir al cole quiero quedarme en casita contigo.
Y así, cada día, cada hora del día…
Estoy bien, gracias. Lo que tengo colgando de mi pierna es una niña si… Este es el nivel de apego en el que estamos ahora.
Yo estoy acostumbrada a que me persiga, eso ya lo hacía antes; el radar detecta madres en el w.c. creo que lo traen todos de serie.
A lo que no estoy acostumbrada es a que no me deje ni un segundo. A que llore como si la matasen en la puerta de la guardería porque no quiere separarse de mí…
Apego, ciertamente. Lo que la gente mal-llama mamitis, supongo que porque muchos nunca hemos visto a niños demostrar ese tipo de apego tan fuerte y demandante y hasta violento dirigido a sus padres pero es bastante habitual que lo tengan con su madre.
Y en eso estamos, hace poco escribí que no iba a tener un tercer hijo aunque me apetecía un montón tener otro bebé y parece que el Karma ha dicho «¿Ah sí? ¿Que se hace mayor dices? Pues toma fase de apego para que te acuerdes de lo que es tener un bebé pegado a ti 24/7»
Y en esto estamos, fase de apego. Os dejo que se ha dormido, voy a ver si recupero mi mano para poder cenar. Es la única comida del día que hago sin una niña encima.
Supongo que dentro de 15 años me pedirá dinero y me dirá que no la espere despierta y entonces echaré en falta agarrar su mano para dormir.
Yo pase por la fase de apego con mi hija no me dejaba hacer nada todo era encima de mí. Le colocaba músicas infantiles y comiquitas en la tv para aprovechar cocinar y hacer las demás cosas en la casa. Cuando cumplió 4 años de edad ya no tenía la fase de apego. Me encanto tu post saludos.
Uffff, son momentos de paciencia. Mi hija siempre quiere estar conmigo y hasta hace poco no podía irme de la habitación donde estuviera ella sin que llorara, gritara y más.
Pero ahora ha vuelto a cambiar y vuelve a ser la niña independiente y cabezota de siempre. Eso sí, si mami está en casa, no hay nadie más.
Disfruta de estos momentos que esta fase de apego te da y verás como poco a poco va pasando
¿Sí? Vaya pues me lo imaginaba pero me quedo más tranquila, espero que recupere su independencia pero sobre todo por ella, porque ella es una niña muy capaz y quiero que se de cuenta de que ella puede hacerlo por si misma.
A ver que tal lo lleva ahora que vuelvo a trabajar.
Gracias por pasarte, un abrazo.
Jaja pobre. Bueno yo más que fase vivo en apego constante. A ver, el me deja ir al baño sola y tal, pero realmente tiene mucho apego conmigo y todo tengo que ser yo, no le vale su padre. Bueno, yo como solo tengo uno y no tengo prisa nunca por nada, e da igual, me aprovecho mientras pueda 😉
jajaja El mayor también era muy apegado pero como era el solo lo llevaba mejor si. Pero claro ahora con los dos pues la verdad que a veces tanto apego satura un poquitín. Aprovecha lo que puedas porque con dos la cosa se complica un pelín! aunque compensa siempre.
Es que es un momento muy sensible en el apego. Están abandonando su fase bebé para ser niños y emocionalmente es muy duro, de ahí que nos necesiten tanto.
Pues si, la verdad es que es duro sobretodo porque una ya estaba acostumbrada a tener algo más de libertad y que se entretuviese sola y ahora para todo me quiere a mi… pero bueno, pasará y recordaré la fase con cariño.
Pues he de decirte que a los dos años yo tambien experimente algo parecido por algo dicen que los 2 años de los niños son un poco terribles, pero todo pasa, a mi también me hubiera gustado tener un tercer hijo pero no cuando veo a dos amigas que hacen malabares para pagar facturas y otras para entenderlos cuando llegan a la adolescencia y etc., se me pasa ya con dos tendré mucho por hacer. Un abrazo!
Los dos años son complicados si, pero yo estaba tan acostumbrada a que ella fuese tan autónoma que me pilló desprevenida totalmente. Gracias por pasarte.