Buenos días! hoy vengo con una reflexión, me he levantado y he preparado todo para llevar a los niños al cole, los he dejado y me he tomado un café con una amiga luego me he marchado a casa y he limpiado, recogido y llenado bolsas de ropa y calzado para llevar al contenedor de beneficencia.
Me he marchado a la compra, he vuelto me he servido otro café y he escuchado el buenos días Madresfera de hoy en el que hablan sobre un curso de Blogging for Dummies que podéis encontrar aquí y me he puesto a pensar en como mejorar mi blog, todo lo que sé de blogs es de forma autodidacta, usando mucho google, leyendo muchos artículos sobre bloggin y SEO y bla bla bla.
Me he planteado hacer algún curso pero ahora mismo no tengo ni el tiempo ni el dinero y además invertir dinero en algo que en principio es solo un hobby y que no me reporta ningún beneficio no creo que me compense, aún así me interesa mejorar mi blog, porque me gusta, porque quiero mejorar la experiencia de la (poca) gente que me lee así que me he puesto a pensar y me he dado cuenta de que mi problema es que no me gusta pedir ayuda y me cuesta mucho aceptarla y de que soy idiota.
Veréis una de mis mejores amigas estudió comunicación audiovisual y tiene un Master en diseño 3D, otro de mis amigos es técnico de sonido, no es que tenga un amigo informático es que tengo TRES, conozco una diseñadora gráfica, dos grandes aficionados a la fotografía y hasta una community manager y cuando he terminado de repasar el listado de gente que me podría ayudar con el diseño del blog, me he preguntado porque no soy capaz de pedírselo.
No soy capaz de decirle a mi amiga con la que tomo café que me haga unas fotos chulas para la portada y los artículos, o a mis amigos informáticos que me expliquen como coño migrar a wordpress sin morir en el intento, o a mi muy mejor amiga la diplomada en comunicación audiovisual que me ayude a diseñar un logo para la página de facebook y que me enseñe a usar photoshop, y a la community manager que me explique un poco como promocionar mejor mi blog…
Me he dado cuenta de que no lo hago porque no puedo pagarles y me parece que me aprovecharía de ellos, que les estaría pidiendo favores y que pierdan su tiempo en algo poco importante (aunque para mí lo sea) y me ha parecido triste, me ha parecido fatal que no sea capaz de pedirles favores a gente que me conoce desde hace 15 años, que han venido casi todos a ver a mis hijos al hospital cuando nacieron, que algunos han estado en mi boda, que los tengo en un grupo de whatsapp coño y nos mandamos memes y chorradas pero no soy capaz de decir ¿alguien me puede ayudar a hacer un logo para el blog? SOY TONTA.
Creo que es falta de confianza y autoestima, en el fondo no creo en mi misma ni en mis contenidos, no creo que sea un proyecto en el que a la gente le pueda interesar participar si no se le paga por ello, no creo que nadie este dispuesto a invertir su tiempo en mí y por eso tengo que guisarlo y comérmelo yo solita, es mi blog, es mi proyecto y tengo que hacerlo yo sola y si no no haberme metido en esto, no me gusta nada lo que he descubierto sobre mi misma, siempre hablo de que hay que educar en tribu, que es una responsabilidad de todos, que la sociedad cada vez es más individualista y luego cuando necesito ayuda no se la pido a mi tribu ¿por qué nos cuesta tanto pedir ayuda? ¿acaso creo que no tengo nada que ofrecer a cambio?
Uy uy uy, esto no me gusta, esto lo tengo que meditar y cambiar, necesito una dosis nueva de autoestima en mi vida y volver a encontrar el valor a mis proyectos para tener la suficiente valentía de pedir ayuda sin sentir que no merece la pena.
¿y a vosotr@s os pasa esto? ¿os cuesta pedir ayuda/favores y darle el valor y la importancia que merecen vuestras ideas y proyectos?
Espero vuestras impresiones en los comentarios, y como siempre gracias por leerme!
Te entiendo porque a mí me cuesta mucho pedir ayuda, de hecho no la pido 😉 y creo que hago un poco la tonta. Si son amigos de toda la vida no se van a molestar, es más lo harán encantados. Y lo de pensar que no le va a interesar a nadie, estás equivocada. A tus amigos seguro y a la gente que va llegando y se queda también. Nunca hay que infravalorarse ni infravalorar tu trabajo. Tiene mucho mérito lo que haces. Realizar un blog no es un trabajo fácil, es un trabajo de constancia, paciencia y perseverancia y que lo hagas sola es más difícil todavía. Así que yo de ti me sentiría orgullosa. Encantada de conocerte y ánimo. Un abrazo!
Muchas gracias por pasarte! Definitivamente es algo que tenemos que cambiar el "chip", no hay nada malo en pedir ayuda de vez en cuando, y lo digo en general no solo con el tema del blog, hay que empezar a buscar una sociedad más colaborativa y menos competitiva, o eso creo…
es verdad, tendemos a infravalorarnos demasiado.. ¡aprovecha y "abusa" de esos contactos ya!
Totalmente identificada. En mi caso llevo poquito con el blog, pero no solo me cuesta pedir ayuda es que me da hasta vergüenza que me lea gente muy cercana, SOY TONTA
Y como con el blog, con todo lo demás, me cuesta pedir ayuda para todo.
Me ha encantado leerte y creo que hay que trabajar en esto, porque todos necesitamos ayuda y al final es hoy por ti, mañana por mi.
Un abrazo!
Leía tu post…y pensaba en las varias veces que yo te he pedido ayuda, y en las muchas que me quedan por pedirte. Y, sin conocerte mucho, sé que me la prestas con cariño, de buena gana, y que seguramente lo seguirás haciendo. Así que, sí, creo que es algo que puedes y debes cambiar. Estoy segura de que el pedir ayuda es una habilidad que querrás que tus hijos aprendan, así que se me ocurre que puedes aprender con ellos! Y eso si…aquí estoy, dispuesta a que practiques conmigo ese "pedir ayuda" si alguna vez puedo hacerlo. Será un placer!!!
Si es que para mí es muchísimo más fácil dar ayuda que pedirla Sara, es un tema que tengo que reflexionar porque no entiendo muy bien por qué me cuesta tanto cuando hay mucha otra gente a mi alrededor que es perfectamente capaz de pedir ayuda o consejo sin sentir que abusa de la confianza de la gente.